Los beneficios de la terapia de oxigenación capilar

Como bien sabemos, el organismo requiere de oxigeno para poder mantener un estado saludable, pues lo mismo sucede con el cabello para poder recuperarse de los efectos contaminantes del aire y las variaciones climáticas. Una de las maneras más efectivas para nutrirlo es la oxigenoterapia capilar o terapia de oxigenación capilar (como también se le conoce).  Se trata de un tratamiento para estimular la regeneración de las células y beneficiar la salud del cuero cabelludo. Si deseas saber más continúa leyendo este apartado.

¿Qué es la terapia de oxigenación capilar?

La terapia de oxigenación capilar es un tratamiento antioxidante que es aplicado de forma directa sobre el cabello. El oxigeno es bombeado de dos formas distintas, puro o con cosméticos. Este método está pensado para hacer una limpieza a profundidad, eliminando las obstrucciones creadas por la suciedad y las impurezas que se pueden acumular. Así mismo, este tipo de tratamiento es muy recomendado para aquellas personas con cabello maltratado.

¿Cómo funciona la terapia de oxigenación capilar?

En la terapia de oxigenación capilar se utiliza una concentración de oxigeno con una pureza de 99%. La tecnología que se emplea renueva las fibras del cabello desde el interior hasta el exterior, esto es posible debido a que les proporciona nutrientes, vitaminas y componentes que combaten la caída.

Esto cambia completamente el aspecto del cabello que esta maltratado a causa de productos químicos o por la excesiva exposición a elementos calóricos (secador, plancha, sol, etc.).

Por otra parte, también ayuda a controlar la secreción sebácea y disminuir la caída del cabello. El tratamiento es bastante sencillo, se utiliza una máquina para procesar el oxigeno y luego es aplicado de manera directa sobre el cuero cabelludo. En ese punto, la cortea se extiende para nutrirse y se sella.

Los beneficios que proporciona la terapia de oxigenación capilar al cabello

En el campo general, una terapia de oxigenación ayuda a prevenir el envejecimiento de la piel, así como también a desintoxicarla. A pesar de que aun no existen estudios contundentes que aseguren los efectos positivos del oxigeno aplicado directamente en el cuero cabelludo, es considerado ideal para regresar la abundancia, luminosidad, fuerza y elasticidad.

De la misma forma, aplicarse frecuentemente terapia de oxigenación capilar evita la irritación en el cuero cabelludo y sana los desperfectos generados por la pigmentación.

Además, es un método sugerido para los cabellos maltratados por planchas o rizadoras, debido a que reduce la deshidratación y el quiebre del mismo.

Pero esto no es todo, a continuación te damos un repaso de cada uno de los beneficios que proporciona la oxigenoterapia capilar.

Ayuda a limpiar los químicos

Una oxigenación profunda asiste en el renacimiento natural de nuevo cabello y a la rehabilitación del mismo luego de aplicarse tratamientos químicos como tintes, decoloraciones, entre otros.

Elimina el crecimiento de caspa

Tomando en cuenta que este tratamiento con oxigeno controla la secreción sebácea, esto favorece a la eliminación de la caspa generada por la deshidratación o la grasa.

Promueve la renovación celular

El tejido encargado del crecimiento del cabello es la papila dérmica, para ello requiere de nutrientes y oxígeno que le permitan crear las células de los folículos.

Complementa tratamientos para la caída avanzada del cabello

A pesar de que la oxigenoterapia capilar no es una terapia que se utiliza para tratar la caída avanzada del cabello, si se usa como complemento para tratamientos como microcirugías o injertos.

Favorece tratamientos para tratar afecciones

La terapia de oxigenación capilar ayuda a tratamiento de algunas afecciones como cuero cabelludo graso, psoriasis, alergias y eczemas. Incluso, también favorece en el control de síntomas de trastornos del cuerpo de cabelludo, manchas, perdida del cabello (en hombres) y caspa sebosa.

¿Cómo se lleva a cabo una terapia de oxigenación capilar?

En una terapia de oxigenación capilar se pueden llevar a cabo varias sesiones personalizadas, cada una de estas pueden tener una duración entre 5 a 15 minutos, el tiempo puede variar dependiendo del tipo de cabello y los daños que este tenga.

En el transcurso de este periodo, la maquina pasa por la superficie del cuero cabelludo para expandir la cutícula a medida que va bombeando la sustancia que se va aplicar.

Luego de la primera, se dan otras dos pasadas más para bombear oxígeno y luego sellar la fibra capilar. Algunos resultados se pueden notar inmediatamente, como el brillo y la suavidad. Eso sí, para acudir a una sesión es esencial tener el cabello limpio y sin ningún producto adicional.

Por lo general, la terapia consiste únicamente en lo que te hemos mostrado. Sin embargo, existen centros de estéticas que ofreces servicios extras como masajes con aceites esenciales ricos en vitaminas (A, B, D, E) para humedecer y acondicionar el cabello.

Cuidados a tener post tratamiento

Aunque en la mayoría de los casos con 4 sesiones por semana de la terapia de oxigenación capilar son suficientes, hay casos especiales en los que se deben hacer más de 12.

Una vez que estos llegan a su fin, son pautadas sesiones para el mantenimiento cada 60 días, esto con el objetivo de conservar y proteger los resultados.

Por otra parte, el encargado de aplicar la terapia indicara cuales son los productos que se tienen que utilizar para que los efectos perduren en el tiempo.

Además, también se hará saber cuáles son las medidas que se tienen que implementar al acudir a sitios como la playa o la piscina.

¿Cuáles son las personas que no se pueden aplicar una terapia de oxigenación capilar al cabello?

Para culminar, es de mucha importante destacar que no todas las personas pueden aplicarse una terapia de oxigenación capilar al cabello.

Esto se debe a que puede llevar a complicaciones de un problema de salud u otro. A continuación te damos una lista de las personas que no pueden optar por una oxigenoterapia capilar:

• Las que están sufriendo de severa hipertensión arterial.
• Con insuficiencia renal.
• Que presentan ataques epilépticos con frecuencia.
• Personas con insuficiencia respiratoria o cardiaca.
• Mujeres embarazadas.
• Personas con cáncer.