Concienciarnos de ello y solidarizarnos dentro de la medida de lo posible es fundamental para conseguir recortar distancias. Son muchas las organizaciones sin ánimo de lucro u organismos que ponen todo su empeño en ayudar a las personas más desfavorecidas, aunque siempre la colaboración ciudadana es imprescindible.
Un proyecto nacido en un pueblo llamado Fayetteville, en Arkansas, Estados Unidos, nos ha llamado la atención porque ha puesto de manifiesto la buena intención de la gente. Se tratan de unas despensas solidarios que ojalá pronto comiencen a dar la vuelta al mundo.
Jessica McClard fue la propulsora de una bonita iniciativa: poner despensas solidarias. Se le ocurrió al ver que se estaban instalando esas bibliotecas libres, para que todo el mundo pudiera leer y compartir los libros. ¿Por qué no hacer lo mismo con productos básicos?
Entonces creó una despensa de madera para poder meter en ella alimentos y otros productos para los más necesitados
El 10 de Mayo se instaló la primera despensa al lado de la iglesia del pueblo
Al poco tiempo, Jessica se llevó una grata sorpresa al descubrir que la gente estaba llenando la despensa con comida
Ya no sólo es una, son muchas las despensas que se encuentran en la ciudad y la iniciativa está recorriendo otras ciudades
Desde comida a productos de higiene íntima, todo tiene cabida
La respuesta ante esta iniciativa es la prueba de la gente es solidaria por naturaleza
Incluso se han puesto despensas cerca de los colegios con material escolar, para que todos puedan estudiar bajo las mismas condiciones
Colaborar en este proyecto es sencillo, puedes rellenar la despensa más cercana o crear tú una nueva
Fuente: boredpanda
Además de Internet y la tecnología también me gusta la decoración en general.