
Sin embargo, hay algunas recetas que no podrían ser más fáciles ni ser más sabrosas. Conseguir un postre perfecto es tan sencillo como seguir estos pasos. A veces, lo bueno no tiene por qué ser complicado.
Para 8 personas vamos a necesitar:
Para la base:
36 galletas de chocolate estilo Oreo que trituraremos
Para el mousse:
1 sobre gelatina sin sabor
3 cucharadas de café espresso, frío
1 cucharada de ron, frío
⅓ taza de agua hirviendo
1 taza de azúcar
⅔ taza de chocolate cacao negro en polvo
2 tazas de nata para montar
2 cucharadita de extracto de vainilla
Para la cobertura final:
220 gramos de nata montada
220 gramos de queso mascarpone
4 cucharadas de azúcar glas
Cacao en polvo
Después de tener todos los ingredientes a mano bastarán unos cuantos pasos a seguir tan sencillos como machacar, añadir y batir para que finalmente puedas disfrutar de una delicia como esta.
- Machaca las galletas y reserva.
- Mezcla el café y el ron, añade la gelatina y deja reposar 2 minutos.
- Añade agua hirviendo y remueve para que la gelatina se disuelva.
- En otro bol, mezcla el cacao en polvo y el azúcar.
- Añade la nata para montar y un poco de extracto de vainilla (opcional). Bate con las varillas a velocidad media hasta que se monte.
- Añade la mezcla de gelatina y vuelve a batir.
- En un vaso, pon 1 cm de galletas trituradas, añade la mousse y refrigera durante al menos 30 minutos.
- Mientras la mousse se enfría, bate la nata para la cobertura hasta que empiece a formarse suaves ondas. Añade el mascarpone y el azúcar glas, y continúa batiendo hasta que se monte.
- Coloca unas cucharadas de esta mezcla sobre la mousse ya refrigerada y espolvorea un poco de cacao en polvo. ¡Listo!
Se acabó probar solo buenos postres fuera de casa, ahora puedes hacerlos tú mismo. ¡Mira el vídeo!
Fuente: Tasty
Gran apasionada del diseño y la escritura, me encanta leer prensa dedicada a la arquitectura, tanto nueva como antigua.