Casas prefabricadas, la nueva tendencia

Solución rápida y económica

Las casas prefabricadas son viviendas que se realizan a partir de secciones o módulos estandarizados que han sido fabricados con antelación, para posteriormente, mandarlas a su ubicación final

Las casas prefabricadas suelen ser de pequeñas dimensiones y generalmente estar hechas de productos reciclados o más ligeros que los de las casas convencionales. Por ser prefabricadas pueden instalarse en pocos días. La necesidad suele disparar también la creatividad y están siendo creados miles de estilos de casas prefabricadas super confortables, ecológicas, económicas y preciosas.

Se consideran una tendencia de éxito en el futuro del hogar en países como Estados Unidos, Alemania, Canadá y España. El éxito se debe a que tienen bajo costo, el tiempo de su construcción es menor y son más sostenibles en comparación con otras viviendas.

Quiero una casa prefabricada

Cuando se decide tener una casa prefabricada, lo primero que se debe hacer es escoger el lugar adecuado para montar los diferentes módulos. Hay que buscar que sea un terreno uniforme para entonces decidir el tipo de vivienda, los materiales a utilizar y las licencias para poder llevar a cabo el proceso, esto con la finalidad de saber si cuenta con el presupuesto para construir.

Antes de tomar la decisión de comprar una casa prefabricada analice las ventajas y desventajas que éstas conllevan.

Dentro de las ventajas de éstas se puede mencionar que son más ligeras, baratas (no sólo en dinero, sino también en tiempo porque las piezas se montan y ensamblan en pocos días), ecológicas comparadas con el resto de los hogares y tienen entrada de luz natural.

El material preferido y más utilizado es la madera, ya que es contemporánea, ecológica, versátil, elegante y fácil de trabajar, pero limita el tamaño de construcción.

El hormigón también es un material recurrente, por ser muy duradero y permite construcciones de gran tamaño. Por último, también es preciso mencionar el metal, ya que es muy resistente, ligero y maleable.

Por otro lado, uno de los inconvenientes es que si se requiere de diseños más elaborados no será tan económico y algunos fenómenos meteorológicos extremos podrían causar daños.

Además el mantenimiento suele ser más caro debido a que hay que pintarlas y aplicarles tratamientos de resistencia continuamente.

Tendencia mundial

Tras años de incertidumbres económicas y laborales, muchas de las personas que vivían en las grandes urbes se trasladaron al campo en busca de una nueva vida, del autoempleo y de nuevas oportunidades de negocio vinculadas al concepto rural.

Si antes la mayoría apostaba por pisos en las grandes ciudades, ahora cada vez son más los que apuestan por una vivienda unifamiliar alejada de la urbe. En parte conscientes del gran beneficio que tendrá asociado esto para su salud y calidad de vida y también por la competencia de precios.

Es interesante conocer las cifras sobre el aumento de la venta de viviendas prefabricadas en España. Entre 2015 y 2017 dicha demanda ha aumentado un 350%. Todo parece indicar que cada vez serán más las viviendas de estas características que podremos ver a lo largo y ancho de la geografía española.

¿Por qué una casa prefabricada de hormigón?

En primer lugar, son más económicas. Ya sea comprar una casa construida en algún barrio residencial o construirla tú mismo, siempre resulta más económico comprar una vivienda que ha sido fabricada en serie. Además, los gastos del terreno y la vivienda modular, nunca son tan elevados como los de una casa de ladrillo y el papeleo necesario para su adquisición, es mucho menor.

Otro factor es la versatilidad del material. El hormigón podría ser categorizado como el material ideal por cualquier arquitecto. Posee un balance entre ligereza y solidez que le permite hacer posible algunas viviendas que no se podrían conseguir con cemento.

El bajo consumo de estas viviendas es otro punto determinante a incluir en la decisión. Una casa prefabricada puede ahorrar hasta 40% de energía en relación a los hogares tradicionales. Además, existe la posibilidad de instalar paneles de energía solar en los modelos prefabricados más modernos.

Por último, no podemos olvidarnos del factor tiempo. En promedio, el montaje de una casa prefabricada de hormigón es de tres a ocho meses. La construcción de una casa de ladrillo puede durar hasta un año entero.

Importante antes de comprar una casa prefabricada

Antes de comprar una casa prefabricada, asesórate por todos los medios, busca en Internet, investiga a las asesoras inmobiliarias y anota cualquier número telefónico que veas. Al final, quédate con la oferta que mejor te convenga.

Reúne todos los documentos: antes de solicitar una casa prefabricada, debes gestionar el papeleo en el ayuntamiento de tu ciudad. Al tener elegida la parcela, se debe solicitar un certificado en el que se determine qué porcentaje del terreno adquirido es posible construir. De esta manera es posible saber las dimensiones de la casa de hormigón para no excederse de los límites.

Tampoco debes olvidarte del tamaño de la vivienda que deseas adquirir; has de tener en cuenta el tamaño final que puede llegar a ser tu familia. Por ello, lo ideal es pedir una casa con una habitación extra que pueda ser utilizada como cuarto de huéspedes.

Las casas prefabricadas son una opción más práctica para aquellas personas que quieren ahorrarse el tiempo y el trajín que traería consigo la construcción de la casa de construcción tradicional.

Tenemos que tener en cuenta que las casas prefabricadas necesitan que el mantenimiento sea más frecuente. Esto es algo hay que tener en mente y que es importante consultar con el profesional.

La mayoría de nosotros conoce el sistema de construcción tradicional y por ende sabe de los costos, tiempos de construcción y los contratiempos que pueden generarse en el proceso. Las casas prefabricadas, por el contrario, nos evitan muchos de los problemas que vienen con la construcción tradicional.