Saltar al contenido

Aislamiento térmico y acústico en edificios

living room

El aislamiento en el mundo de la construcción es aplicable a cualquier tipo de edificación, incluidas las viviendas y las construcciones industriales. Se trata de un procedimiento que proporciona confort en cuanto a protección ante los cambios de temperatura y también limitar el paso del sonido externo hacia el interior. Pero además, hay que tener en cuenta que estos procedimientos utilizan diversos tipos de materiales aislantes que a largo plazo permiten ahorrar en energía y en costes de mantenimiento.

Índice

    La importancia del aislamiento térmico y acústico

    El aislamiento térmico es un tipo de trabajo que combina técnicas, tecnologías, métodos y materiales que permiten reducir el intercambio de temperatura entre dos ambientes. En construcción se ejecutan estos trabajos para proporcionar protección a una edificación. De esta manera es posible que se mantenga una temperatura constante, aunque la temperatura ambiental sea extremadamente baja o alta. 

    En cambio, el aislamiento acústico hace referencia a las técnicas y materiales empleados para atenuar la transmisión de los niveles sonoros entre diferentes ambientes. 

    Generalmente, se utilizan planchas cuyo diseño estructural y elección de materiales permiten que sean instalados en las paredes, techos, ventanas o puertas, así como también hay aislante térmico para suelo. Este es muy importante en el mundo de la construcción, ya que maximiza la eficiencia de cualquier edificación

    También proporciona mayor protección y confort, por lo cual se ha convertido en un objetivo fundamental a la hora de diseñar y rehabilitar. Las construcciones modernas son más eficientes tanto térmica como acústicamente, e incluso su bajo consumo energético impulsa el cambio hacia la sostenibilidad. 

    Dado que son muchos sus beneficios, ya hay legislaciones sobre aislamiento térmico-acústico en varias naciones del mundo. Esto se ha traducido en la construcción de viviendas y edificaciones comerciales e industriales con las más innovadoras soluciones aislantes. De esta manera se sigue en el proceso de avance para el desarrollo y creación de nuevas técnicas para aislar. Es posible notar que estas nuevas soluciones son cada vez más eficaces y ofrecen una mejor adaptabilidad a cada entorno. 

    En las viviendas es mucho más fácil notar el impacto positivo del aislamiento de las construcciones. Por ejemplo, el ahorro en las facturas para el pago del suministro de luz y gas. También hay otros beneficios en cuanto a criterios de habitabilidad y confort. Estos mismos aspectos son aplicables a otros tipos de edificaciones.

    Los diferentes tipos de materiales con los que se puede aislar un edificio

    Actualmente, hay una amplia oferta de distintos tipos de materiales con propiedades aislantes. Por ejemplo, en los catálogos de productos encontramos varios tipos de paneles rígidos o paneles enrollables. Estos generalmente se fabrican a partir de compuestos de lana mineral ( lana de vidrio o de roca). Otros materiales comunes son la espuma de poliuretano, poliestireno extruido y el plástico polietileno. 

    Los paneles semirrígidos y rígidos de lana de vidrio o de roca son una excelente opción como cerramientos acústicos para paredes interiores. Pero también hay otras opciones tales como el yeso laminado, que generalmente se utiliza para el aislamiento en fachadas y suelos flotantes. En el caso de la lana de mineral natural es un buen aislante acústico para medianeras y divisiones interiores. Aunque también se emplea en las fachadas de doble hoja y en las fachadas ventiladas. 
    La lana de vidrio es la opción ideal cuando se busca mejorar el confort y la eficiencia energética de una edificación. Es la elección más tradicional y su precio es asequible. Igualmente, hay una amplia oferta de aislantes en tabiques de yeso laminado y también de plástico polietileno de baja densidad (LDPE).