Aún molestos, estos cepillos son extremadamente importantes para nuestra seguridad. Los laterales de las escaleras mecánicas son lugares propicios para que se nos enganche la correa de una mochila, un cordón de zapato o la propia ropa. Para evitar sufrir un accidente por culpa de ellos, es recomendable instalar esta hilera de cepillo áspero. Las fibras no se mueven con el resto de las escaleras mecánicas y provocan una fricción considerable con cualquier objeto que los roce. La mayor parte de los usuarios instintivamente se retira de ellos al resultarle molesto el roce con los mismos. No obstante, la función original de estos cepillos era la de servir de barrera física para evitar la entrada de pequeños objetos en la maquinaria interna de la escalera.
El desencadenante principal de su instalación fue el incendio en una escalera mecánica en la estación King Cross de Londres, en noviembre de 1987, donde fallecieron 31 personas y resultaron heridas otras 100. El fuego se originó debido a una cerilla mal apagada que se coló en la maquinaria de la escalera. Con el paso del tiempo, la grasa que lubrica los engranajes se había mezclado con desperdicios, como pelusas y papeles, proporcionando un combustible que ardió tan rápido que provocó la explosión inmediata de las escaleras.
Como consecuencia del siniestro, los gobiernos comenzaron a tomarse mucho más en serio los peligros de las escaleras mecánicas. Por ello, instalaron este peculiar elemento. Sea como sea, lo cierto es que estos cepillos son salvan la vida constantemente, ¡y nosotros sin saberlo!
Fuente: Gizmodo
Periodista especializada en decoración. Interesada por todo lo que tiene que ver con el interiorismo y el mundo deco.