El café se ha convertido en una bebida internacionalmente conocida y necesaria para muchas personas, sobre todo para las que madrugamos. Hay personas que no se despiertan hasta después de tomar el primer café, y también los hay que lo toman hasta para dormir, cuestión de gustos.
La industria no ha tardado en hacerse eco de la fama de esta bebida y rápidamente ha comenzado la creación de novedosas máquinas que nos hacen un café delicioso rápidamente. Sin embargo, las máquinas no son las responsables del buen sabor de un café, para ello lo que es fundamental es la materia prima.
Dependiendo de a quién le preguntes, te dirán que el café está mejor o peor de una u otra manera. Nosotros hoy queremos enseñarte una receta diferente, que probablemente no conocías, y que para muchos es incluso mejor que el café tradicional, además de muy cómodo, aunque no utilice máquina alguna.
Estamos hablando de aprender a infusionar el café en frío en vez de en caliente, que es como se hace normalmente. Esta técnica nos permite conservar el café con todas sus propiedades hasta dos semanas en la nevera, se puede mezclar con agua o con leche y seguir manteniendo su sabor auténtico.
Con todas estas ventajas, es una técnica que merece la pena al menos probar.
¿Qué necesitamos?
– 540 ml. de agua mineral a temperatura ambiente
– 40 gr. de café natural de tueste medio, preferiblemente recién molido
Elaboración:
Paso 1: En un recipiente de cristal añade los dos ingredientes y remueve hasta que el café se haya humedecido bien. Tapa el recipiente y déjalo infusionar a temperatura ambiente y apartado de la luz durante al menos 12 horas.
Paso 2: Para filtrar nuestro café, en primer lugar lo pasaremos por un colador fino, para retirar la mayor parte del café molido. En segundo lugar volveremos a colarlo, pero esta vez añadiendo un filtro de papel, así nos aseguraremos bien de retirar todos los posos.
Paso 3: Conservar el recipiente de cristal en la nevera durante 2 semanas como mucho.
Paso 4: Para consumirlo, sólo tendrás que mezclar el café con agua o leche. Lo más habitual es hacerlo a partes iguales, pero eso ya depende del gusto de cada uno.
Fuente: denikatessen
Además de Internet y la tecnología también me gusta la decoración en general.