No estamos preparados para lavar la ropa correctamente. Nos falta información y tiempo, y nos sobra suavizante. Creemos que es suficiente con lo que hacemos y no nos planteamos nada más.
Pero a la vista está que muchas veces el resultado que obtenemos no es el deseado. Malos olores, deterioro precoz de la ropa y otras barbaridades son los hechos visibles que demuestran que algo hacemos mal.
Nos creemos que cuanto más, mejor, pero lo cierto es que nunca fue más erróneo un hecho. Ni hace falta lavar a temperaturas industriales, ni tenemos que echar detergente hasta que rebosen. He aquí los errores más comunes que cometemos cuando lavamos nuestra ropa y que acaban estropeándola antes de lo que nos gustaría:
Índice
Nos pasamos con la cantidad de detergente que usamos