La sal es algo que todos tenemos en casa, y si me descuido, en grandes cantidades y de varios tipos. Es el condimento de nuestra cocina por excelencia, sin el que todos nuestros platos quedarían sosos. Sea como sea, la sal nos encanta, en su justa medida, y por ello nunca falta en casa.
Sin embargo, utilizar la sal únicamente para cocinar es darle la espalda a un sinfín de usos prácticos que también puede tener dentro de nuestra propia casa. Y es que sí, la sal no sólo le da sabor a la vida, también nos ayuda a que las tareas más tediosas sean más sencillas. ¿A que ahora la sal te gusta aún más?
La sal puede ser nuestro mejor aliado a la hora de limpiar según que cosas de casa. Desde la plancha de la ropa hasta restos de café, pasando por una plancha de hierro fundido, la sal puede con prácticamente todo lo que se le ponga por delante.
Te demostramos estos y otros trucos en este vídeo, que resulta, cuanto menos, curioso.
Fuente: Bright Side
Además de Internet y la tecnología también me gusta la decoración en general.
