Una mandarina es lo único que necesitas para hacer una vela así de original

Con la llegada del invierno nuestra cocina se llena de mandarinas, la fruta de esta temporada por excelencia. Esto no sólo nos alegra por la calidad y sabor que tiene esta fruta, sino también por las oportunidades creativas que nos ofrece.

Así es, las mandarinas pueden convertirse en nuestro mejor aliado para hacer algunas velas naturales y artesanales, que son ayudarán a a darle calidez a nuestra casa, así como animar el ambiente en las fiestas navideñas que se aproximan. Hacer velas con mandarinas, además de original y creativo, nos da la oportunidad de crear velas aromáticas que perfumen el aire.

Hoy os vamos a enseñar un truco para crear velas de larga duración con la piel de la mandarina, de modo que no tenemos que desperdiciar la fruta para conseguir nuestro objetivo. Lo primero que tenemos que hacer es cortar cuidadosamente la piel de la mandarina a lo largo, sin llegar a atravesar la fruta, para que la piel salga perfectamente en dos piezas.

En la parte inferior de la mandarina ponemos un poco de aceite y dejamos que se humedezca. En la parte superior de la cáscara podemos hacer algunos adornos para que el efecto de luz sea mayor.

Finalmente, sólo tendremos que encender la fibra principal de la parte que hemos humedecido con aceite, y tendremos una espectacular y fantástica vela decorativa. En el siguiente vídeo podréis ver paso a paso el procedimiento que, aunque está en inglés, se entiende perfectamente.