Fregaderos de diseño para una casa increíble

En la cocina, los fregaderos son un elemento imprescindible. Junto con la encimera, la nevera y la vitrocerámica o la cocina de gas, conforma el conjunto de materiales necesarios para poder vivir. Al igual que la encimera, la elección de un fregadero conllevará una perdurabilidad mayor que los anteriores componentes. Sin embargo, solemos dar una mayor importancia en diseño a esta, mientras que el fregadero se entiende como una pieza meramente funcional. Pero, ¿no puede ser un fregadero útil y al mismo tiempo estar dotado de un diseño elegante?

Fregaderos y sus múltiples opciones

A la hora de elegir un fregadero, tenemos que pensar en la función que desarrolla. Tanto cubertería como vajilla serán debidamente limpiadas en ellos, al igual que la fruta y verdura que tendremos que lavar. Por lo tanto, el material que escojamos es fundamental. El acero inoxidable es uno de los más conocidos, aunque también hay quien escoge mármol o acrílico.

En segundo lugar, el número de cubetas conllevará un menor o mayor uso del espacio de la cocina. Los fregaderos con dos cubetas son más prácticos, tanto a la hora de fregar -uno puede ser utilizado para los platos sucios y otro para los limpios, por ejemplo- como para mantener una parte del fregadero despejada para realizar otras tareas, como lavar fruta o verdura. Sin embargo, hay quien prefiere reservar el menor espacio posible al fregadero por cuestiones diversas. En estos casos, también encontramos la opción de fregaderos encastrados, con una cubeta y un escurridor para depositar la vajilla y cubertería limpias, o incluso de una sola cubeta. 

El grifo es otro de los elementos que debemos seleccionar. En la actualidad, el mercado ofrece diversas alternativas. Cada vez se utilizan más los grifos de caño alto, es decir, aquellos con una altura elevada que permiten distanciarse más del fregadero. Los grifos de caño extraíble se han exportado desde otros países, como Estados Unidos, en los que gozan de gran popularidad. Son aquellos que se pueden extraer y mover para limpiar con facilidad. Estos grifos se parecen a los de las duchas y son muy cómodos para los fregaderos pequeños o de una sola cubeta. Por su parte, los grifos de caño abatible son los más comunes en España y son aquellos que se colocan en la dirección del fregadero. Podemos encontrar, por lo tanto, múltiples alternativas.

Una vez seleccionados estos componentes quedaría la elección del color de la encimera y la forma del fregadero. Existen fregaderos circulares o cuadrangulares, con esquinas más o menos redondeadas. De igual modo, el color de la encimera debe encajar con el resto de la cocina, al igual que el del material escogido. Por ejemplo, si las encimeras de nuestra cocina son de color negro, el fregadero debe ir acorde y materiales como el mármol pueden desentonar. De igual modo, si pretendemos hacer de la cocina un espacio cálido, el material debe buscar el mismo objetivo. 

En general, se trata de hacer del espacio algo útil y elegante, en el que encaje como un elemento decorativo más.