Ahora bien, darnos los caprichos que queramos para hacer que nuestro dormitorio sea, además, un lugar acogedor y alegre, nunca está de más. Si bien reformar de arriba a abajo nuestra habitación se nos puede ir de presupuesto, hacer algunos pequeños ajustes nos puede ayudar a conseguir nuestro objetivo sin gastarnos mucho dinero en ello.
Muchas veces los pequeños detalles marcan una gran diferencia, y hoy os lo queremos demostrar con algunos consejos low cost que podrán darle un aire renovado a vuestro dormitorio. ¡Atentos!
1. Dale a la iluminación la importancia que se merece
Tener una habitación luminosa es más importante de lo que podemos imaginar. Tanto la luz natural como la artificial nos pueden ayudar a conseguir un espacio acogedor en el que nos apetezca estar. Evita los colores oscuros, opta por tonos claros que ayuden al paso de la luz.
2. Renueva tu dormitorio con un poco de pintura
La opción más clásica se presenta también como la más afectiva. Pintar las paredes del dormitorio puede renovar la habitación por muy poco dinero. Se recomienda utilizar aquellos colores que benefician el sueño, como los azules, los verdes o los colores neutros. Si por el contrario buscas contraste, puedes optar por pintar sólo una pared de un color más llamativo. En la fotografía vemos el negro, una opción muy arriesgada pero que puede dar un toque sofisticado en caso de combinarlo con el blanco.
3. Crea ambiente con papel pintado
Lo bueno que tiene el papel pintado es que podemos elegir entre miles de diseños diferentes con motivos originales que destacan en nuestra pared. Si elegimos un estilo más estrafalario, lo ideal es aplicarlo únicamente en una pared, para así evitar la sensación de agobio. Recuerda que las rayas verticales nos pueden ayudar a «ampliar» visualmente los espacios más pequeños.
4. Un toque de color
Aunque los colores suaves son los que mejor van con un dormitorio, eso no quiere decir que debamos renunciar a tener un espacio alegre. Los colores vivos pueden estar presentes con pequeños elementos, como cojines, ropa de cama, sillones, etc.
5. La importancia del almacenaje
Evita el desorden y el caos en tu dormitorio poniendo suficiente espacio de almacenaje en la habitación. Sea grande o pequeña, es fundamental que cada cosa tenga su lugar, así nos aseguramos de mantener cierta armonía en el espacio.
6. Los cabeceros, los grandes protagonistas
Los cabeceros pueden tener una gran importancia, además de darle un toque original y creativo a nuestra habitación. Podemos elegir entre muchos diseños que, además, pueden satisfacer todo tipo de necesidades, como la separación de espacios, almacenamiento, etc.
7. Puertas que marcan la diferencia
Parece que las puertas es el último elemento en el que nos fijamos en una habitación, sin embargo quizás sea el aliado que necesitamos. Y es al ser un elemento sin mucho peso en la composición general, tenemos mayor libertad a la hora de arriesgarnos con diseños más llamativos.
8. Accesorios
Las plantas ayudan a crear un ambiente familiar y personal, incluso en el dormitorio. A su vez, si queremos conseguir que la habitaicón parezca más grande, los espejos nos pueden ayudar a conseguirlo. Las lámparas, por su parte, pueden darle un toque original a la parte superior de la habitación, gran olvidada en muchas ocasiones.
Fuente: proyectos.habitissimo
Además de Internet y la tecnología también me gusta la decoración en general.