Aunque lo cierto es que las obras no sólo se miden por lo incómodas que pueden llegar a ser, también por lo caras que resultan. Sin embargo, no hace falta hacer grandes obras para renovar nuestra casa, ni siquiera nuestra cocina. Hay muchos cambios que podemos hacer que resultan más fáciles, cómodos y baratos que una gran obra y el resultado es igual de espectacular.
Te demostramos que renovar tu cocina con un lavado de cara puede tener resultados geniales con el antes y después de 6 reformas de cocina. ¡Te vas a sorprender!
1. Más luz y modernidad
Anteriormente era una cocina anticuada en la que los muebles de madera se llevaban todo el protagonismo. Sin embargo ahora la cocina tiene mucha más luz, al cambiar toda la parte de arriba a color blanco.
La renovación de los armarios también es espectacular, porque se ha conseguido un cambio muy grande simplemente cambiándole el color. De los armarios superiores se han sustituido dos por algunas estanterías que abren más el espacio. Por último se ha cambiado la encimera, creando un contraste entre el blanco, negro y madera.
2. Cocina entristecida
Esta cocina necesitaba un toque de luz urgentemente. La luz natural siempre es lo más recomendado, pero si no existe esa posibilidad debemos recurrir a algunos trucos.
En este caso han pintado la pared de un color verde agua y los muebles de blanco, esto hace que la cocina se vea mucho más luminosa. Se ha puesto un suelo de parquet en forma de espiga y se ha cambiado la iluminación amarilla por una blanca. Si os fijáis, ni siquiera le han hecho falta cambiar los tiradores de los armarios.
3. Cambio sencillo
No hace falta que la cocina esté en ruinas para querer cambiarla, en este caso tenemos una cocina totalmente funcional sólo que se había quedado un poco anticuada estéticamente. Quizás estos cambios no resultan tan espectaculares pero nos vale para comprender lo mucho que se puede hacer con muy poco.
En este caso el cambio ha provocado que se trate de una cocina mucho más luminosa y alegre. Sólo han cambiado la encimera, la estantería y los tiradores, no ha hecho falta cambiar nada más.
4. Cambio de distribución
Es importante conseguir que todas las estancias de nuestra casa sean cómodas, incluso la cocina. Esta cocina estaba como desordenada y se veía realmente sosa, sin embargo tenía muchas posibilidades con tanto espacio.
Lo primero que se ha hecho es quitar el módulo inferior que parecía cerrar el área. Para darle alegría, se ha creado un contraste pintando la pared del fondo de azul que contrasta con el gris claro de los armarios y el pastel del resto de paredes. Por último se ha puesto una mesa con un par de sillas a un lado, llenando más el espacio.
5. Cocina atemporal
El antes de esta cocina nos muestra la típica cocina que se diseñaba en los años 70 u 80. Destacan los azulejos con frutas o los armarios de madera.
El cambio ha sido simple pero muy notorio, sólo hemos tenido que convertir el blanco en color protagonista. De esta manera se ha conseguido tener una cocina atemporal. Lo único que se ha hecho es pintar los muebles de blanco y sustituir alguna puerta por cristalera, y por último, se ha colocado un friso de madera sobre los azulejos.
6. Cambio radical
Es un cambio radical pero que, como en los casos anteriores, no han tenido que hacer mucho. El blanco vuelve a ser el protagonista de la cocina, esta vez con muchos contrastes, por un lado con el suelo oscuro, la encimera negra y el verde turquesa de la pared.
¿Qué cosas podemos tener en cuanta a la hora de renovar nuestra cocina?
1. Utilizar técnicas de obra seca que son más fáciles de aplicar y abaratan la reforma.
2. Busca la luz natural a través de la pintura de los muebles, las paredes, etc.
3. No tienes que sustituir los muebles, sólo pintarlos y en algún caso, cambiar los tiradores.
4. El cambio de encimera no es estrictamente necesario.
5. Puedes elevar los módulos de la cocina o eliminar aquellos que te roben más espacio. Cuida la distribución.
Fuente: Proyectos.habitissimo
Además de Internet y la tecnología también me gusta la decoración en general.