En Casas Increíbles hemos demostrado en un sinfín de ocasiones que una casa de ensueño no tiene por qué ser la más grande, ni la más ostentosa. Hay casas de a penas 20 metros cuadrados que tienen tanto encanto que pueden ser la casa perfecta para muchas personas, o por el contrario, casas grandes que pueden resultar desesperantes.
Si las casas nos gustan y nos sorprenden, sobre todo las que resaltan por algo diferente, también lo hacen las historias que hay detrás. Así ha sido cómo Tom Raffield ha conseguido cautivarnos con su casa, construida con sus propias manos con la ayuda de su mujer.
Nos trasladamos hasta Cornualles, Inglaterra, y allí nos encontramos con este artista artesano experto en curtir la madera. Generalmente trabaja con piezas más pequeñas, muebles o sistemas de iluminación, pero esta vez se quiso embaucar en un proyecto personal mucho mayor, pero que sin duda ha merecido la pena.
A pesar de que era un proyecto que llenaba de ilusión a la pareja, lo cierto es que en absoluto fue un acto de virtuosismo ni nada similar. La verdadera historia fue que tras comprar el terreno, la economía familiar no podía asumir el gasto de pagar una casa de obra, al menos no la casa en la que ellos quería vivir.
Les quedaban 115.000 euros, así que decidieron invertirlos en tiempo y materiales para hacer ellos mismos su casa soñada a base de madera, eso sí, sin renunciar al diseño al que Tom Raffield nos tiene acostumbrados en el resto de trabajos.
Las líneas curvas, el minimalismo y el contraste de colores está presente en toda la casa, aunque bien es cierto que la madera y su color original es el que predomina en absolutamente toda el espacio.
Tom Raffield es capaz de hacer con sus manos cualquier cosa cuando se trata de madera, pero una de sus especialidades y sus piezas más cotizadas son las lámparas. Maneja la madera como si de una hoja de papel se tratara y eso consigue hacer que elementos de decoración como estos resalten por encima del resto.
Prácticamente cualquier detalle de la casa está hecho con madera, desde los muebles, hasta las lámparas, los percheros o incluso el marco de los espejos.
La luz natural, a su vez, está presente en toda la casa. Grandes ventanales que permitan conectar el interior con el exterior es una de las premisas de la casa que, sin duda, tiene un aire natural en todos los sentidos.
Tardaron dos años en terminar la obra, poco tiempo teniendo en cuenta su diseño y los recursos con los que contaban. La pareja y algunos amigos dedicaban todo su tiempo libre en este proyecto. Transcurrido este tiempo, sin duda sienten que todo el esfuerzo ha merecido la pena.
El programa de televisión ‘Grand Designs‘ se hizo eco del proyecto y decidió documentar todo el proceso de construcción, acumulando más de 500 horas de grabación. Así no sólo ha llegado esta historia a más gente, sino que el trabajo del artista se ha dado más a conocer.
La casa cuenta con cuatro habitaciones, tres baños y tres salones. Una casa amplia y bonita que, de haberla construido al modo convencional, le hubiese costado muchísimo más cara.
Al fin y al cabo, esta pareja ha conseguido hacer la casa de sus sueños empezando desde abajo, y reconforta saber que después de mucho sacrificio llega la recompensa. ¡Yo desde luego no me lo pensaba dos veces antes de vivir en una casa como esta!
Fuente: TomRaffield, Idealista
Además de Internet y la tecnología también me gusta la decoración en general.